Segundo aniversario de las consecuencias del desastre de Kakhovka – resultados de investigaciones integrales

Latifundist Media
La invasión rusa a gran escala en Ucrania ha causado enormes pérdidas humanas, ecológicas y económicas. La destrucción de la presa de la central hidroeléctrica de Kakhovka el 6 de junio de 2023 provocó el vaciado del embalse de Kakhovka, que era la principal fuente de abastecimiento de agua para el sur de Ucrania. Esto afectó negativamente al estado ecológico del entorno y desató una crisis socioeconómica en las regiones de agricultura de regadío. Por ello, en el período de posguerra, un paso importante es revisar el orden de prioridades de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en el sur del país, para garantizar la supervivencia, el retorno y la continuidad de la vida de la población, así como la reconstrucción de los territorios. Las investigaciones previas tuvieron un carácter local y limitado, lo que impedía una visión sistémica de las relaciones causa-efecto en los cambios de los ecosistemas en la zona del desastre. La mayoría de las publicaciones disponibles en el espacio público se basaban en suposiciones no respaldadas por datos reales. La falta de estudios complejos y verificados sobre el estado real del territorio desecado del embalse de Kakhovka —asociada con el acceso restringido a la zona debido a las hostilidades activas y a la escasez de información confiable sobre la totalidad de la zona siniestrada— complicaba la evaluación objetiva de las consecuencias del ecocidio y obstaculizaba la elección de un escenario adecuado para el funcionamiento posbélico de dicha zona. Por ello, es crucial combinar investigaciones de campo con datos de imágenes satelitales para realizar una investigación integral, fiable y documentada sobre las consecuencias de la guerra, teniendo en cuenta la opinión pública y la posición de la población local respecto a las posibles direcciones de las estrategias regionales y medidas para la recuperación posbélica de los territorios afectados. Los resultados y conclusiones de los científicos de la Universidad Estatal Agroecónomica de Jersón fueron obtenidos mediante la realización de investigaciones de campo integrales y el calibrado y decodificación de imágenes satelitales de Sentinel-2, Sentinel-3 y Landsat 8–9.
Proyecto “Investigación sobre las consecuencias de la destrucción de la presa de Kakhovka y el vaciado del embalse para la población de Ucrania” – se trata de un estudio científico y sociológico integral llevado a cabo por especialistas de la Universidad Estatal Agraria y Económica de Jersón (Ucrania). El proyecto tiene como objetivo realizar una investigación a gran escala sobre las consecuencias de la destrucción de la presa de la central hidroeléctrica de Kakhovka y el vaciado del embalse, con un enfoque especial en el impacto para la población de la región sur de Ucrania, así como fundamentar posibles direcciones para el funcionamiento posbélico del territorio que antes ocupaba el embalse de Kakhovka.
La superficie de estudio abarcó aproximadamente 11,0 millones de hectáreas (véase la Figura 1).
Esta investigación fue realizada con el apoyo del Instituto Canadiense de Estudios Ucranianos (Canadian Institute of Ukrainian Studies, CIUS, Universidad de Alberta, Canadá) y del programa Documenting Ukraine, una iniciativa del Instituto de Ciencias Humanas (IWM), Viena, Austria.
Etapas principales de la investigación:
Estudio del estado del lecho del embalse de Kakhovka tras su desecación.
Investigación del estado del sistema estuarino Dnipro–Bug y del mar Negro.
Análisis de los cambios climáticos y de la formación del microclima en la región del antiguo embalse de Kakhovka.
Evaluación del estado del territorio en la zona donde, en el período previo a la guerra, se practicaba el riego agrícola.
Estado de los cultivos en la región de Jersón en la primavera de 2025.
Estudio sociológico: “Embalse de Kakhovka: pasado, presente y futuro”.
Fundamentación de los posibles escenarios para el funcionamiento del territorio del embalse de Kakhovka.
Figura 1. Territorio del estudio sobre el impacto de las acciones bélicas
1. Estudio del estado del lecho desecado del embalse de Kakhovka
A finales de septiembre de 2023, la superficie cubierta por vegetación alcanzaba las 52,4 mil hectáreas. El período invierno-primavera de 2024 se caracterizó por condiciones climáticas favorables, en gran parte debido a las crecidas primaverales, que provocaron la inundación de hasta el 70 % del área del antiguo embalse. Esto generó una acumulación significativa de humedad en los sedimentos del lecho, lo que favoreció un rápido crecimiento de biomasa vegetal y una intensa síntesis de clorofila en las hojas. A finales de septiembre de 2024, la superficie de cobertura vegetal dentro de los límites del antiguo embalse se había duplicado (véase Figura 2). Las áreas sin vegetación están cubiertas de conchas, presentan takyres (suelo agrietado típico de zonas áridas), arenas, piedras y zonas someras (véanse Figuras 3–5).
Figura 2. Vista aérea de la cobertura vegetal



Figura 6. Formación de la cobertura vegetal en el lecho del embalse, septiembre 2023–2024
Figura 7. Evaluación del estado de la vegetación y pérdida de capacidad fotosintética, septiembre de 2024
Nota para la interpretación de imágenes satelitales: El color negro y los tonos oscuros representan áreas cubiertas de agua. El color blanco y los tonos claros indican arenas y conchas. El color verde y sus tonalidades muestran vegetación con distintos niveles de desarrollo (una vegetación saludable se representa con verde intenso). Los tonos marrones y marrón grisáceo reflejan suelos secos o degradados.
Figura 8. Estado hídrico del río Dnipro en el tramo del antiguo embalse de Kakhovka (230 km de longitud)
El color azul representa áreas cubiertas por agua.
El color blanco representa rocas, nubes o vegetación con clorofila anómalamente alta.
En cuerpos de agua, el blanco puede indicar alta concentración de materia orgánica o exposición de sedimentos.
Figura 9. Recuperación de la vegetación primaveral (a) y síntesis de clorofila (b) en el antiguo territorio del embalse de Kakhovka en abril de 2024 y 2025
En contraste, la primavera de 2025 tuvo escasa cobertura nival y deficiente humedad, lo que provocó un déficit hídrico en la cuenca del Dnipro. Esto impidió el almacenamiento de agua suficiente en la cadena de embalses, afectando gravemente la gestión hídrica regional. Las descargas desde la central hidroeléctrica del Dnipro fueron limitadas, no se produjeron inundaciones, y el río se secó considerablemente en el área del antiguo embalse. Como consecuencia, la recuperación de la vegetación en primavera fue débil, con síntomas de estrés hídrico severo y bajos niveles de clorofila. Además, debido a la sequía y a las acciones militares, se documentaron incendios en 2.000 ha del lecho del embalse (17 focos entre 5 y 500 ha cada uno).
2. Evaluación del estado del sistema estuarino Dnipro-Bug y del Mar Negro
La investigación se realizó utilizando indicadores hidrológicos, biológicos y fisicoquímicos, que permiten caracterizar la calidad del agua y el funcionamiento del ecosistema acuático. Se identificaron efectos negativos provocados por la guerra, entre ellos la destrucción de la presa de Kakhovka en 2023, el drenaje del embalse, y el traslado de contaminantes con niveles de concentración que exceden los valores normales en entre 1,1 y 51,8 veces. Esto ha resultado en la contaminación de 6.800 km² del sistema estuarino y del Mar Negro. El deterioro del régimen hidrológico estacional en el sistema Dnipro-Bug fue de entre 1,42 y 1,82 veces comparado con los niveles normales, lo que causó estancamiento de masas de agua, acumulación de nutrientes, y un aumento de la concentración de clorofila en 2,9 veces. Todo esto ha intensificado la eutrofización (proceso de contaminación y floración de agua) y empeorado la calidad del agua superficial. Las propiedades fisicoquímicas del agua se deterioraron hasta en 4 veces (véase Figura 10). En las sustancias suspendidas y orgánicas se detectó una alta densidad de restos vegetales y protozoos, especialmente infusorios como Oxytricha fallax, Vorticella microstoma, Uronema nigricans, Pseudoglaucoma muscorum. Estos organismos son característicos de zonas polisapróbicas, es decir, aguas contaminadas con corrientes débiles y zonas de estancamiento. Los residuos vegetales del antiguo embalse de Kakhovka fueron arrastrados por las inundaciones primaverales hacia las aguas superficiales. El aumento en los volúmenes de materia orgánica muerta y protozoos se debe a su lavado desde los sedimentos del fondo del lecho del embalse durante las inundaciones de 2024.
Figura 10. Deterioro de la calidad del agua en la zona de la cuenca estuarina del Dnipro-Bug al inicio de junio de 2024. En la imagen satelital se muestran dos ubicaciones de observación: Primera — zona del río Dnipro cerca de la presa destruida de la central hidroeléctrica de Kakhovka; Segunda — boca del río Dnipro y parte oriental de la laguna Dnipro-Bug
Las masas de agua arrastran restos vegetales y sedimentos del fondo que contienen sustancias tóxicas y metales, que luego son transportados por la corriente y se acumulan en el sistema estuarino Dnipro-Bug y en el Mar Negro (Figuras 11, 12). Esto ha provocado la alteración de la estabilidad y el retroceso ecológico de los ecosistemas acuáticos de agua dulce y marina.
Figura 11. Distribución de sustancias contaminantes en la zona estuarina de la laguna Dnipro-Bug y el Mar Negro como consecuencia de la destrucción de la presa de la central hidroeléctrica de Kakhovka (junio–octubre 2024)
Nota: Se realizó una comparación del estado de la zona estuarina de la laguna Dnipro-Bug y del Mar Negro antes de la destrucción (2021) y después de la destrucción de la presa (2024). Los colores verde, amarillo y rojo indican zonas con diferentes concentraciones de contaminantes:
«moderadamente contaminadas» (verde);
«sucias» (amarillo);
«muy sucias» (rojo).
Figura 12. Aumento en la concentración de sustancias contaminantes en diferentes ubicaciones de la zona estuarina Dnipro-Bug y en el Mar Negro
3. Cambios climáticos y formación del microclima en la región del embalse de Kakhovka
En condiciones de riego irregular y deficiente, el agua es el factor clave para la estabilidad de los ecosistemas. La región de Jersón, en el contexto de cambios climáticos globales y temperaturas anormalmente altas, se caracteriza por una catástrofe en el déficit de recursos hídricos. En julio de 2024 se registró un máximo histórico de temperatura del aire en las regiones del sur de Ucrania: +40,5–42,0 °C. La temperatura en la superficie del suelo alcanzó los 67 °C, lo que correspondió a una evapotranspiración potencial de 12,5 mm/día. Estos valores superaron la norma estadística para el período 1991–2020 en más de 12 °C. El récord anterior de temperatura del aire era +36,4 °C (año 1959). Según Climate Central, el índice Climate Shift Index (CSI) durante el período del 12 al 18 de julio de 2024 estableció un nivel extraordinario 5 de cambio climático en el 80 % del territorio de Ucrania. Se registró un aumento quintuplicado en la frecuencia de temperaturas anormalmente altas en la región de Jersón.
El aumento de la temperatura del aire en el sur de Ucrania va acompañado de una disminución de las precipitaciones productivas, lluvias locales intensas, aumento de la evapotranspiración y desertificación. El embalse de Kakhovka desempeñaba un papel importante para las regiones del sur en la acumulación, almacenamiento y redistribución de agua dulce para las necesidades económicas y sanitarias de la población. La conservación del agua era crucial en los años con bajos niveles hídricos, lo que además garantizaba un caudal ecológico mínimo y una calidad adecuada del agua en el tramo inferior del río Dnipro. Aproximadamente el 98 % de las reservas de agua del río se forma en la parte alta (zonas de bosques mixtos) y media (zonas de bosques esteparios) de la cuenca del Dnipro. En el tramo inferior, la cuenca local representa solo el 2,0 %, lo cual no puede cubrir las necesidades de recursos hídricos de la población local. Por ello, el suministro de agua a estas zonas es una tarea estatal importante para asegurar las condiciones de supervivencia de los ucranianos y el funcionamiento de los ecosistemas.
La guerra, el vaciamiento del embalse de Kakhovka y el aumento de las manifestaciones negativas del cambio climático han provocado déficit de humedad y estrés térmico en los ecosistemas. En la figura 13 se presenta una comparación del estado del territorio cercano a la presa de la central hidroeléctrica de Kakhovka: a) antes de la guerra a gran escala en Ucrania (principios de abril de 2020 y 2021), b) después de la destrucción de la presa y el vaciamiento del embalse (principios de abril de 2024 y 2025). La comparación está basada en datos del satélite Landsat:
Abril de 2020, temperatura en la superficie:
Agua (sobre la presa: 7-8 °C, bajo la presa: 8-13 °C),
Suelo: 24-28 °C,
Cubierta vegetal: 17-19 °C.
Abril de 2021, temperatura en la superficie:
Agua (sobre la presa: 5-7 °C, bajo la presa: 6-11 °C),
Suelo: 20-25 °C,
Cubierta vegetal: 15-18 °C.
Abril de 2024, temperatura en la superficie:
Agua (sobre la presa: 12-14 °C, bajo la presa: 11-16 °C),
Suelo: 27-33 °C,
Cubierta vegetal: 23-26 °C.
Abril de 2025, temperatura en la superficie:
Agua (sobre la presa: 15-17 °C, bajo la presa: 14-19 °C),
Suelo: 27-36 °C,
Cubierta vegetal: 25-27 °C.
Figura 13. Cambios en el calentamiento de la superficie de los ecosistemas cerca de la presa de la central hidroeléctrica de Kakhovka
Las acciones bélicas y la actividad relacionada de las tropas de ocupación causaron el vaciamiento de fuentes de agua, principalmente del embalse de Kakhovka, lo que imposibilitó el riego de tierras agrícolas y el llenado de la red de hidro-melioración. Esto, a su vez, tuvo como consecuencias la pérdida de la estabilidad bioclimática de la región, el aumento de la presión térmica sobre la superficie del suelo, la aceleración de la evapotranspiración, el deterioro de las propiedades y la degradación de los suelos, la pérdida de humedad del suelo en las zonas costeras, la pérdida de las buenas propiedades vegetativas de la vegetación y su secado, incendios, exposición de los suelos, tormentas de polvo y la desertificación de las zonas de riego. Las consecuencias negativas del deterioro de la estabilidad bioclimática fueron sentidas por los agricultores de la parte derecha de la región de Jersón. Las causas fueron el empeoramiento del estado de la vegetación de los cultivos en 2024 y la destrucción de grandes áreas de cultivos de invierno en 2025.
En la Figura 14 se presentan imágenes satelitales de la nubosidad (color blanco) del área de estudio antes y después de la destrucción de la presa de Kakhovka, durante el período de riego activo de cultivos de primavera tardía (junio-julio).
Figura 14. Formación de nubosidad en la zona del embalse de Kakhovka y la agricultura irrigada
Después del vaciamiento del embalse de Kakhovka, se registran procesos caóticos de desplazamiento de las nubes según la dirección de las masas de aire, ausencia de focos locales de formación de nubes, un notable adelgazamiento de las nubes, falta de organización y uniformidad en su distribución. Esto ha provocado una disminución en la frecuencia y cantidad de precipitaciones, déficit de humedad del suelo, deterioro del estado de los agrocenosis, destrucción de cultivos y empeoramiento de la productividad bioclimática de los agrocenosis. Sin la restauración de un nivel adecuado de suministro de agua, la situación en esta zona climática de déficit hídrico extremo y agricultura de riesgo seguirá deteriorándose.
4. Estudio del estado del territorio de la zona donde se realizaba riego en el período previo a la guerra
Se ha comprobado que las acciones bélicas, la interrupción de la agricultura, el vaciamiento del embalse de Kakhovka y la destrucción del riego han provocado un estrés hídrico, que es una manifestación negativa de la transformación natural-climática y la desertificación de las zonas de riego en Ucrania. Para el año 2020, la superficie efectivamente irrigada en Ucrania era de 551,4 mil hectáreas. Después de la invasión militar a gran escala, solo el 18% de la superficie de riego quedó bajo control de Ucrania. La mayoría de los sistemas de riego se encuentran en territorios ocupados de las regiones de Jersón y Zaporiyia, así como en la República Autónoma de Crimea. Se ha determinado que el vaciamiento del embalse de Kakhovka y la ausencia de riego han provocado la alteración de las condiciones hidrológicas en la margen izquierda de la región de Jersón, lo que ha llevado a la desecación y vaciamiento de los cuerpos de agua en estas áreas (figura 15).
Figura 15. Desecación de cuerpos de agua en el territorio temporalmente ocupado de la margen izquierda de la región de Jersón a partir de 2024
Nota:
Bare Soil Index (BSI). En las imágenes BSI, el color verde brillante indica un buen nivel de vegetación en los agrocenosis, lo cual se debe a un alto nivel de suministro de humedad para las plantas, característico de las zonas irrigadas. Las tonalidades oscuras de verde representan vegetación arbórea, biotopos herbáceos esteparios, malezas y agrocenosis en tierras no irrigadas. El color rojo indica tierras sin vegetación.
Normalized Difference Moisture Index for Crop Moisture Stress (NDMISTRESS). Determina el nivel de estrés hídrico en las plantas. En las imágenes, el color azul intenso indica zonas con un alto nivel de humedad y muy buenas condiciones para la vegetación, principalmente en áreas irrigadas. El color turquesa intenso indica áreas bien hidratadas con un nivel adecuado de vegetación, y el turquesa claro corresponde a zonas con niveles satisfactorios de humedad y vegetación. Las áreas en blanco muestran niveles bajos y críticos de humedad, donde no hay vegetación o hay plantas secas. Entre 2021 y 2024 se observa una tendencia a la desecación en las zonas de agricultura irrigada de la región de Jersón, que actualmente está ocupada. En 2024, la humedad y la vegetación en los agrocenosis y la vegetación natural se registraron solo en pequeñas áreas donde la humedad era suministrada por acuíferos subterráneos, así como en las zonas ribereñas de pequeños ríos, cuerpos de agua desecados, áreas a lo largo de canales hidro-técnicos, restos de bosques artificiales y fincas.
Figura 16. Estado de la cobertura vegetal y humedad del territorio en la zona de riego de la margen izquierda de la región de Jersón, ocupada por Rusia, en julio de 2021-2024
Figura 17. Salinización y alcalinización de tierras en la margen izquierda de la región de Jersón ocupada por Rusia
Figura 18. Incendios en la región de Jersón en 2024
En caso de que continúe la guerra, la destrucción adicional de las cortinas forestales, la ausencia de riego y agricultura en los territorios ocupados con alta deflación, se pronostican pérdidas anuales mínimas de suelo de 60-75 toneladas por hectárea, equivalentes a una pérdida de 0,4-0,6 cm de la capa superior del suelo por año. En los epicentros de las tormentas de polvo, las pérdidas de suelo podrían alcanzar entre 4 y 5 cm por año. Esto significa que en el epicentro de las tormentas frecuentes, la capa superior del suelo de 25-50 cm se perderá en 7-11 años.
Figura 19. Consecuencias de la erosión eólica en la margen izquierda de la región de Jersón en 2024, según datos de Sentinel 2 (EpNE – nivel de deflación de suelos esteparios sin vegetación)
5. Estado de los cultivos en Jersón, primavera de 2025
La guerra, los campos minados, el vaciado del embalse de Kakhovka, la destrucción del sistema de riego, las manifestaciones negativas del cambio climático, la ausencia de cobertura de nieve, las heladas, el déficit hídrico y la sequía, la erosión eólica, la destrucción de los esfuerzos agrícolas de años y la escasa cosecha: bajo estas condiciones trabajan y sobreviven los agricultores de la zona cercana al frente de Jersón. Al borde de la vida y la muerte, los agricultores intentan mantener las tradiciones del territorio agrícola, ofrecer empleo a la población local, pagar impuestos y sostener la seguridad alimentaria del país. El vaciado del embalse de Kakhovka ha provocado un deterioro en la humedad y el microclima de Jersón, una reducción crítica de los niveles freáticos, déficit de humedad del suelo, salinización secundaria, disminución del rendimiento de los cultivos agrícolas, empobrecimiento de la cobertura vegetal, aumento en la extensión e intensidad de la erosión eólica, todo esto agravado por las manifestaciones negativas del clima. La falta de cobertura de nieve y las heladas en 2025 empeoraron la vegetación de los cultivos de invierno, mientras que la sequía agravó la situación en marzo y abril.
En la imagen se muestran las márgenes derecha (libre) e izquierda (temporalmente ocupada) del embalse de Kakhovka en Jersón. La distancia entre ambas orillas es de 3,5 a 7,0 km. En las imágenes se pueden distinguir claramente las zonas con diferentes densidades de cobertura vegetal (figura 20a) y las áreas sin vegetación (figura 20b)
Figura 20. Cubierta vegetal en las zonas ribereñas del embalse Kakhovka drenado en la región de Jersón a principios de mayo de 2025
Blanco — tierras sin vegetación,
Naranja y amarillo — vegetación con crecimiento deprimido,
Verde claro — vegetación satisfactoria,
Verde intenso — buena vegetación.
Los cultivos de invierno presentan principalmente vegetación deprimida y satisfactoria; aproximadamente el 40 % de las áreas de cultivos de invierno se secaron. Buena vegetación se observa en cultivos de primavera de granos y legumbres y en colza de invierno. Debido a la sequía, los agricultores se ven obligados a resembrar con cultivos tardíos, esperando lluvias en mayo. La precipitación total en mayo fue de 20-25 mm en Jersón, pero solo 4 mm en la zona ribereña del embalse.
Figura 21. Estado de la vegetación según los valores del NDVI (Índice de Vegetación de Diferencia Normalizada)
Dentro del lecho del embalse Kakhovka, se observó una recuperación parcial de la vegetación natural, principalmente en valles y zonas ribereñas (zona de 400-500 metros), cerca de aguas poco profundas y a lo largo del cauce del río Dnipro. La descarga de humedad del suelo y escorrentía superficial (figura 22) provoca una significativa pérdida de humedad en los agroecosistemas. La ausencia de crecidas impidió la recuperación de la vegetación en aproximadamente el 60 % de las plantas dentro del embalse a principios de mayo de 2025.El estado de la vegetación de la flora natural dentro del embalse ahora depende de las lluvias de mayo y de las condiciones de humedad y temperatura del aire durante el verano.
Figura 22. Direcciones de descarga de humedad (indicadas con líneas amarillas) desde los agrocenosis hacia las quebradas y las zonas costeras del lecho del embalse
Figura 23 muestra el estrés hídrico de las plantas: Blanco — sin vegetación, Rojo — alto estrés hídrico, Verde claro — estrés medio, Verde oscuro — bajo estrés. Más del 70 % del territorio está sin vegetación o con vegetación bajo alto estrés hídrico.
Figura 23. Estado de la humedad de la vegetación
El déficit hídrico y la sequía dificultaron la recuperación de la vegetación tras las heladas. En la figura 24 se presentan fotos del estado de los cultivos de invierno en Jersón el 5 y 19 de mayo de 2025.
Figura 24. Estado del trigo de invierno en mayo de 2025, distrito de Boryslav, región de Jersón
6. Investigación sociológica "Embalse Kakhovka: pasado, presente, futuro"
Las conclusiones se basaron en una encuesta a 189 residentes locales de la región de Jersón, considerando parámetros cuantitativos (número, grupo etario) y cualitativos (categorías poblacionales — género, tipo y área de actividad). Según los resultados, para el 79,4 % de los encuestados sus condiciones de vida y actividades económicas dependían del embalse Kakhovka; el 85,7 % considera que la prosperidad de la región depende del funcionamiento del embalse. El 81,5 % ve necesaria la restauración, llenado y funcionamiento del embalse con nuevas tecnologías. En particular, el 65,8 % opina que las decisiones para la reconstrucción postbélica deberían basarse en una visión colegiada de científicos, autoridades, gobiernos locales, expertos internacionales y representantes empresariales. El 54 % prioriza la competencia científica, la fiabilidad y veracidad de la información en publicaciones científicas. El 88 % sostiene que el drenaje del embalse Kakhovka es un problema complejo que afecta la economía, ecología y seguridad social de la región. La discusión sobre su restauración es relevante, ya que el 94,8 % vive actualmente en territorios dañados o planea regresar tras la guerra. Así, la escala y el daño por la destrucción del embalse por fuerzas ocupantes se evalúa según el nivel de riesgos ecológicos y socioeconómicos, y la posibilidad de restauración postbélica conforme a la visión de la población local.
7. Justificación de escenarios para la funcionalidad del territorio del embalse Kakhovka
Se proponen tres escenarios postbélicos para la zona (Figura 25):
Escenario 1: Reconstrucción de la presa de la central hidroeléctrica y llenado del embalse según sus condiciones previas.
Escenario 2: Formación de un ecosistema natural-vegetal.
Escenario 3: Creación de un sistema natural-artificial con tecnologías modernas, con llenado parcial de agua y establecimiento de ambientes pradera-humedal y forestal en la parte superior del embalse.
Figura 25. Escenarios de funcionamiento del territorio del embalse de Kajovka
Para cubrir las necesidades de agua potable, sanitarias y riego en el sur de Ucrania se requieren más de 500 millones de m³ anuales, además de 700 millones adicionales para actividades agrícolas auxiliares. Tras el drenaje del embalse Kakhovka, existen diversas opiniones sobre cómo cubrir el déficit hídrico anual de más de 1200 millones m³:
Uso de reservas del embalse Dnipro: Está cerca, pero según estudios hidrológicos no puede cubrir totalmente la demanda. Su uso excesivo causaría problemas ecológicos y déficit para usuarios de agua, afectando el régimen hidrológico y la estabilidad ecológica del bajo curso del río Dnipro.
Extracción directa del cauce del río Dnipro: En años de poca agua no cubriría ni el mínimo necesario para el sur. En años promedio no puede satisfacer necesidades medias o máximas. En periodos de alta disponibilidad y consumo máximo, solo cubre 40-50 %.
Red de pozos subterráneos: El uso excesivo agotaría reservas estratégicas, permitiendo la intrusión de aguas salinas del Mar Negro y de Azov, causando degradación, compactación y salinización de suelos.
Desalinización y uso de agua salada: Es económicamente inviable y energética-mente costosa, incapaz de satisfacer demandas de agua dulce. El riego por goteo en suelos salinos y salinizados del sur provocaría zonas de salinización secundaria y formación de salares, rechazando este tipo de proyectos.
Uso de aguas residuales y superficiales de la ciudad de Jersón: Antes de 2022 se vertían 20,5 millones m³ (18 millones de aguas residuales y 2,5 superficiales). Se propuso su reutilización para riego tras tratamiento, permitiendo regar 9,5 mil hectáreas urbanas y suburbanas. Esto reduciría la contaminación del ecosistema del bajo Dnipro y aumentaría producción agrícola. Sin embargo, cubriría solo el 3 % de la superficie irrigada del nivel de 2022, por lo que la restauración completa depende del embalse Kakhovka.
En este contexto, merece atención el tercer escenario (Figura 26). Satisfacería necesidades hídricas, preservaría biodiversidad y biotopos de ecosistemas natural-artificiales, apoyando el desarrollo sostenible y el uso equilibrado del sur de Ucrania. Se propone separar mediante una presa la parte superior poco profunda (725 km², 34 % del embalse). Esto conservaría el 45 % de la vegetación existente con una biomasa total de 2,3 millones de toneladas. Se mantendrían 55 % de áreas con vegetación arbórea y 37 % de praderas y humedales. La zona protegida sería un refugio crucial para especies raras de flora y fauna y mejoraría el corredor ecológico meridional dnieperiano paneuropeo.
La solución tecnológica requiere un canal de derivación (marcado en amarillo en la figura 26) que mantenga niveles de humedad en temporadas calurosas para preservar la biomasa vegetal y abastecer necesidades sanitarias y domésticas de la población local.
Figura 26. Escenario 3 – sistema natural-artificial del embalse de Kakhovka
El área inundada tendrá un 66% (1400 km²) de la superficie del embalse, con un volumen de agua de aproximadamente 15 km³. Esto permitirá restaurar el biotopo de limo activo del fondo, que es una importante base alimentaria para los peces y contribuye a la purificación biológica de las aguas superficiales. La separación de la zona somera y la reducción del área acuática de la parte superior del embalse mantendrán la velocidad de la corriente, lo que mejorará el funcionamiento hidrológico de las partes superior y media del embalse.
Para prevenir las consecuencias negativas del deterioro de la calidad del agua superficial y la eutrofización, es necesario eliminar la vegetación y los sedimentos del fondo antes de inundar el embalse. Los sedimentos removidos, tras su procesamiento y limpieza, pueden usarse para la recuperación de suelos degradados y dañados por la guerra.
Para asegurar la reproducción y preservar la diversidad de los hidrobiontes, es importante considerar las características técnicas de la construcción de un canal para peces durante la edificación de la presa. Además, para reducir la entrada de grandes volúmenes de aguas residuales sin tratar, es necesario modernizar los sistemas de tratamiento de las industrias y asentamientos, reforzar las riberas y restaurar las zonas de protección del río Dnipro y sus afluentes, implementar medidas contra la erosión y optimizar las tierras agrícolas según principios de gestión por cuencas hidrográficas.
Esto reducirá el impacto negativo de la actividad económica en los ecosistemas acuáticos y creará condiciones para un uso equilibrado del agua y la tierra. En particular, para restaurar la fertilidad del suelo, implementar medidas anti-erosión y conservar la humedad, es imprescindible aplicar la agricultura regenerativa, pasando de monocultivos a rotaciones pluricultivo que incluyan leguminosas y cultivos de cobertura, aumentando la diversidad de agroecosistemas mediante cultivos nicho que atraigan polinizadores.
También es importante destacar la posibilidad de aplicar agricultura diferenciada, especialmente con tecnologías de labranza sin volteo del suelo, prohibiendo la labranza en pendientes, y enfocando los esfuerzos en la restauración de la cubierta vegetal natural y de los cinturones forestales. Igualmente es crucial crear cinturones anti-erosión (áreas con vegetación parcialmente densificada de manera artificial que sirven como refugio para fauna silvestre).
Por lo tanto, hoy en día sigue siendo un tema relevante la elección del escenario óptimo para la recuperación y funcionamiento posbélico del sur de la región, considerando la capacidad de adaptación de la población ucraniana a las nuevas condiciones de vida.
En este contexto, es importante apoyar a los productores pequeños y medianos, tomar en cuenta la opinión pública y la posición de la población local respecto a las estrategias regionales y medidas de recuperación posbélica de los territorios afectados, revisar los objetivos y garantizar un desarrollo sostenible acorde con las necesidades socioeconómicas y el estado ecológico de los ecosistemas territoriales, teniendo en cuenta el cambio climático y desarrollando escenarios óptimos para el suministro de agua a la agricultura durante el periodo de transición de recuperación posbélica en el sur de Ucrania.
Perspectivas de investigación
Los resultados obtenidos constituyen un recurso informativo importante para documentar la guerra en Ucrania, siendo una prueba del ecocidio cometido por el agresor armado ruso contra Ucrania y Europa. La investigación está dirigida a buscar vías para la recuperación de los territorios dañados y establecer las condiciones para el retorno de la población, lo que requiere un mayor estudio científico de las consecuencias ecológicas y la fundamentación científica de las direcciones para la recuperación socioeconómica. La predicción y el desarrollo de escenarios de funcionamiento de estos territorios sólo pueden realizarse actualmente evaluando la capacidad de adaptación de los ucranianos a las condiciones formadas.
Por ello, es importante continuar con las investigaciones, realizar un monitoreo constante de las condiciones de los territorios temporalmente ocupados, en primera línea y próximos al frente; continuar con estudios sistemáticos sobre las causas y consecuencias del ecocidio y genocidio; ampliar el área de estudio y aumentar la indicación de parámetros de calidad y componentes del medio ambiente; informar a la población y a la comunidad internacional a través de la publicación de resultados sobre las consecuencias de la guerra; desarrollar proyectos de información geográfica con justificaciones detalladas de los escenarios de funcionamiento del embalse de Kakhovka basados en principios de gestión por cuencas hidrográficas y desarrollo sostenible; y elaborar proyectos cartográficos para la planificación espacial de la recuperación posbélica de los territorios afectados por la guerra.
Información presentada según resultados de investigaciones integrales:
Vitaliy PICHURA – Doctor en Ciencias Agrícolas, Profesor, Jefe del Departamento de Ecología y Desarrollo Sostenible en honor al profesor Yu.V. Pylypenko, Universidad Agraria y Económica Estatal de Jersón
Scopus: https://www.scopus.com/authid/detail.uri?authorId=57189495808
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-0358-1889
Larisa POTRAVKA – Doctora en Ciencias Económicas, Profesora, Profesora del Departamento de Ecología y Desarrollo Sostenible en honor al profesor Yu.V. Pylypenko, Universidad Agraria y Económica Estatal de Jersón
Scopus: https://www.scopus.com/authid/detail.uri?authorId=57202444369
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-0011-2286