La posible implicación de Witkoff como principal representante del proceso de negociaciones de paz
Photo: AP/Evan Vucci
Cuando el enviado especial Kellogg hizo varias declaraciones sobre la participación de Europa en el proceso de negociaciones.
La publicación en The Washington Post de un artículo en el que se fabricó artificialmente la "imparcialidad de Kellogg" a través de su hija: "Megan Mobbs, hija de Kellogg, es presidenta de la RT Weatherman Foundation, una organización benéfica que ha estado ayudando a Ucrania desde el inicio de la guerra a gran escala", — principal narrativa del artículo.
Estos hechos permiten afirmar que la reducción de las competencias de Kellogg y la ampliación de las facultades de Witkoff fueron un proceso planificado por un determinado grupo de influencia en la Casa Blanca.
Posible interés de Witkoff en un acuerdo con Moscú
Witkoff estuvo a cargo de las negociaciones en Oriente Medio. Los primeros informes sobre el resultado de las conversaciones fueron negativos. Sin embargo, la situación cambió drásticamente a finales de 2024. Formalmente, la administración de Biden aún funcionaba, pero desde finales de noviembre, Witkoff ya estaba involucrado en el proceso de negociación en Oriente Medio.
El acuerdo sobre Gaza comenzó a avanzar activamente desde las primeras semanas de enero, cuando Hamás flexibilizó una serie de exigencias.
Se puede suponer que esto pudo haber ocurrido debido a la intervención de Moscú, que mantenía estrechos contactos con Hamás (el 27 de octubre de 2023, representantes de los militantes visitaron Moscú) y con el presidente de Palestina, Mahmud Abás.
Obviamente, además de los lazos oficiales, Moscú mantenía estrechos contactos no públicos. Esto se destaca aún más por el hecho de que, a finales de febrero de 2024, Rusia planeaba celebrar una reunión interpalestina en Moscú, invitando a todas las facciones palestinas, incluido Hamás.
Así, el panorama se presenta de la siguiente manera:
Entre el 28 y el 30 de diciembre, un avión especial Il-96-300 llega a EE. UU. con una delegación rusa (posiblemente con el enviado de Putin, Dmitriev). Durante este tiempo, se alcanzaron ciertos acuerdos. Supongamos que, entre otras cosas, se discutió la participación de Moscú en el alto el fuego en Palestina.
Desde enero, el acuerdo sobre el alto el fuego comienza a avanzar
7 de enero – Keith Kellogg pospone su visita a Kiev. En ese momento, se hablaba de al menos hasta el 20 de enero. Es probable que en este período ya estuviera en marcha la sustitución de Kellogg por Witkoff.
13 de enero – Según Reuters, Putin se reunió con Dmitriev. Según la transcripción oficial de la reunión publicada en la web del Kremlin, discutieron inversiones del Fondo Ruso de Inversión Directa, valoradas en 2,3 billones de rublos (22,53 mil millones de dólares).
15 de enero – Biden confirma el acuerdo con Hamás y, el 20 de enero, durante su investidura, Trump usa el acuerdo como su primer logro incluso antes de asumir el cargo.
Desde el 20 de enero, la administración de Trump evita comentar sobre los vínculos con Moscú, que solo se darán a conocer al mundo debido a la presión mediática. Sin embargo, antes de eso:
8 de febrero, un avión Gulfstream G650ER despega de EE. UU. Inicialmente, Moscú declaró que esto no estaba relacionado con contactos con la parte estadounidense, pero el 9 y 10 de febrero se supo que el enviado especial Witkoff estaba a bordo. El proceso de liberación del prisionero de Moscú, Mark Fogel, probablemente no se llevó a cabo en un solo día. Por lo tanto, es razonable suponer que hubo un proceso previo de negociaciones y acuerdos que Washington y Moscú ocultaron al resto del mundo.
Ese mismo día (10 de febrero), se lleva a cabo un ataque informativo contra Kellogg a través de su hija, con el artículo en The Washington Post.
18 de febrero – Se celebran negociaciones entre EE. UU. y Moscú en Arabia Saudí.
19 de febrero – El presidente de Palestina califica estas negociaciones entre las delegaciones de Moscú y EE. UU. como "la cúspide de una política sabia" (más tarde, los servicios secretos rusos intentaron eliminar esta noticia de Internet). Este hecho indica que las negociaciones israelí-palestinas probablemente sirvieron de base para fortalecer los contactos entre EE. UU. y Moscú a través de sus enviados especiales: Witkoff y Dmitriev, quien conoce bien Oriente Medio debido a su trabajo en el Fondo Ruso de Inversión Directa.
Este desarrollo de los acontecimientos indica que el acuerdo de Oriente Medio (con Hamás) se llevó a cabo con la mediación de Moscú, donde el objeto de intercambio fueron las posteriores negociaciones entre EE. UU. y Moscú en Riad. Moscú utilizó estas negociaciones tanto para romper su aislamiento como para intentar excluir a Europa y Ucrania del proceso de negociaciones. Para lograrlo, un grupo de influencia dentro de EE. UU. eliminó previamente a Kellogg como obstáculo, ya que este estaba inclinado a involucrar a Europa en el proceso y preparaba las visitas correspondientes.
Por grupo de influencia nos referimos a una asociación informal dentro de la Casa Blanca que incluye a Musk, Donald Trump Jr., el yerno de Trump, Kushner, Vance y Witkoff, quienes abogan por la restauración inmediata de los lazos comerciales con Moscú, incluso a costa de los intereses vitales de los aliados de EE. UU. en Europa.
Esta tesis se ve confirmada por las publicaciones de la prensa estadounidense que informan de la intención de la Casa Blanca de involucrar a Moscú en las negociaciones con Irán para lograr un acuerdo sobre la congelación del programa nuclear de Teherán, el cual depende en parte del apoyo de Moscú. También se confirmó con la reciente conversación entre Trump y Putin sobre Ucrania, en la que se abordó el programa nuclear iraní. La Casa Blanca emitió rápidamente una declaración pública al respecto: "Trump y Putin, durante su conversación, coincidieron en que Irán nunca debe estar en una posición que le permita destruir a Israel", lo que evidentemente alude al programa nuclear iraní, con el que Moscú está ayudando a Teherán.
Si se considera veraz la información del artículo de The Telegraph del 5 de marzo de 2025, en el que se menciona que Witkoff es uno de los que se oponen a la reanudación del diálogo con Ucrania después de los acontecimientos durante la visita de Zelenski a la Casa Blanca, esta postura del enviado especial podría explicarse por los acuerdos que alcanzó Witkoff en sus contactos con la parte rusa:
– La participación de Moscú en el acuerdo de Oriente Medio.
– La participación de Moscú en el acuerdo nuclear iraní.
– Recursos: un plan para aliviar las sanciones contra Moscú.
El comportamiento diplomático inusualmente sutil de Moscú (diferente de su agresividad habitual) subraya el hecho de que las negociaciones del Kremlin están siendo dirigidas por un grupo específico. El rápido ascenso de Dmitriev en el círculo de Putin sugiere que él es probablemente el responsable de la estrategia detrás de los recientes éxitos en las negociaciones.
Además, Dmitriev también apareció en el informe del fiscal especial estadounidense Robert Mueller sobre la interferencia de Moscú en las elecciones presidenciales de EE. UU. en 2016. Mueller estableció que, antes de la investidura de Donald Trump en 2017, Dmitriev se reunió en las Islas Seychelles con Erik Prince, patrocinador de Trump.
En aquel entonces, Dmitriev utilizó sus contactos en Goldman Sachs. El NYT describió la situación en 2016 de la siguiente manera:
"Dmitriev, jefe del fondo soberano de riqueza de Rusia y representante no oficial del presidente Vladímir V. Putin, envió un mensaje de texto a un amigo estadounidense de origen libanés vinculado a la campaña de Trump. Dmitriev quería establecer contacto rápidamente con alguien del círculo cercano de Trump, preferiblemente Donald Trump Jr. o Jared Kushner. Antes de que terminara el mes, se comunicó con Rick Gerson, amigo de Kushner (yerno de Trump), quien dirige un fondo de inversión en Nueva York. Discutieron la posibilidad de un proyecto conjunto de inversión".
El informe Mueller revela la magnitud de los vínculos entre la campaña de Trump y los rusos. Donald J. Trump y 18 de sus asociados tuvieron al menos 140 contactos con ciudadanos rusos y WikiLeaks o sus intermediarios durante la campaña de 2016 y la transición presidencial. Photo: nytimes.com
A cambio, Putin permitió a algunos fondos occidentales (exclusivamente estadounidenses) vender valores rusos. Así lo informó Bloomberg.
Según el decreto publicado, Putin permitió al fondo registrado en EE.UU. 683 Capital Partners LP comprar valores de empresas moscovitas que anteriormente pertenecían a aproximadamente una docena de fondos de inversión y fondos de cobertura occidentales. Entre los fondos que obtuvieron el derecho a vender sus activos se encuentran Franklin Advisers Inc., Templeton Asset Management Ltd. y Baillie Gifford Overseas Ltd.
Gracias a su cargo en el Fondo de Inversión Directa, Dmitriev tiene muchos contactos en Oriente Medio —en Catar, Arabia Saudí, EAU—, y Witkoff/Kushner tienen los mismos intereses comerciales.
Se puede suponer que Dmitriev utilizó los mismos contactos (a través de Kushner) que ya le permitieron en 2016-17 establecer comunicación con el entorno de Trump. Al igual que en 2016-17, Dmitriev utilizó contactos empresariales para atraer el interés de ciertas personas del círculo de Trump.
¿Es Kushner el que mantiene el puente de comunicación entre EE.UU. y Moscovia?
Esa es la pregunta principal. Si suponemos que tanto Kushner como Witkoff tienen buenos contactos, se puede construir fácilmente una cadena de conexión Putin-Dmitriev-Kushner-Witkoff-Trump.
El vínculo más estable entre Kushner y Witkoff podría ser proporcionado por Musk. Musk tiene buenas, incluso amistosas, relaciones con el yerno de Trump, Kushner. Pero el momento más interesante es un evento a finales de 2022.
El 19 de diciembre de 2022, Musk y Kushner fueron captados juntos por las cámaras en la final del Mundial de Fútbol en Catar. Uno de los motivos del interés de Musk por el fútbol era la necesidad de buscar inversores cataríes y saudíes para la compra de Twitter (Qatar Holding y Kingdom Holding Co).
Para esta necesidad, Musk contó con la ayuda de Kushner, quien tenía los contactos adecuados y, al mismo tiempo, quería asegurar apoyo mediático para Trump (por ejemplo, Trump le debe a Kushner el haber negociado el apoyo de la red mediática mexicana Grupo Televisa, que le proporcionó votos adicionales de la comunidad latina).
Kushner era el director de medios informal de Trump, encargado de negociar el respaldo mediático, la financiación de la campaña de Trump y la compra de Twitter, una de las piezas clave de la estrategia.
Nos interesa el hecho de que uno de los inversores de Musk para la compra de Twitter fue Witkoff, y esto está documentado públicamente en un informe.
También hubo informes en la red de que Kushner también participó (como parte interesada) en las negociaciones en Oriente Medio entre Hamás e Israel, ya que tiene intereses comerciales en la región, incluidas inversiones en Phoenix Holdings.
En última instancia, la situación se ha desarrollado de la siguiente manera:
Witkoff, amigo cercano y socio comercial de Trump, logró el acuerdo actual entre Israel y Hamás (evidentemente a través de contactos con Moscovia).
Witkoff y compañía (¿Kushner?) proponen alcanzar un "acuerdo" con Irán a través de la mediación de Moscovia.
Dmitriev, por parte de Moscovia, es responsable de los contactos directos con el entorno de Trump y de la dirección que en términos generales se denomina "reducción de sanciones".
Dmitriev asegura una reacción coordinada por parte de Moscú (por ejemplo, declaraciones sobre recursos), lo que refuerza la capacidad de Witkoff y compañía para captar el interés de Trump.
¿Qué dicta esta situación para Ucrania?
Mientras Witkoff ocupe el cargo de representante especial y Musk tenga mayor influencia que los funcionarios de carrera como Rubio o Voltz en la Casa Blanca, para Ucrania es extremadamente peligroso entrar en negociaciones de paz efectivas en este formato, ya que existe una amenaza directa de sesgo por parte de los negociadores de EE.UU., quienes estarían implementando un acuerdo de "reparto" con Moscovia, donde Ucrania sería solo un objeto de interés.
Sin embargo, Ucrania se encuentra en una posición vulnerable, por lo que una de las estrategias viables que sigue Kiev es declarar públicamente su disposición a negociar, pero en la práctica retrasar el proceso por medios no públicos o crear un proceso paralelo junto con Europa.
Al mismo tiempo, este retraso debe ganar tiempo a la espera de un debilitamiento de la posición de Musk en el curso de la lucha política interna en EE.UU. El debilitamiento de Musk debilitaría el vínculo Kushner-Witkoff y potencialmente fortalecería a los políticos de carrera de la Casa Blanca. El fortalecimiento de los políticos de carrera de la Casa Blanca podría reducir la influencia de Witkoff en el proceso de negociación actual y permitir a Ucrania intentar recuperar su posición en este proceso.