Potencial de agotamiento de los tanques de combate en reserva del ejército de ocupación de Moscovia
*Moscovia: nombre histórico de la Federación Rusa.
Espero que comprendamos que estos cálculos son aproximados, ya que no hay información 100% verificada sobre el estado, cantidad y disponibilidad de los tanques si no estás físicamente en las instalaciones y almacenes enemigos para contar cada unidad.
Conclusión principal del análisis:
Con las bases de almacenamiento, el ritmo constante de destrucción de tanques, la producción y la ausencia de suministros externos (de Corea del Norte o China), Moscovia tendría reservas para 1.5-2 años.
Matemáticas y reflexiones.
Bases de almacenamiento
Hasta el 24 de febrero, Military Balance señaló la existencia de 3330 unidades en servicio activo en las fuerzas de Moscovia (en realidad, cerca de 3000) y 10,250 unidades en almacenamiento. Esta cantidad incluye tanques como T-64, T-55 y T-34.
Al incluir los modelos T-64/62 y T-55, el número asciende a aproximadamente 17,500 unidades (2800 T-54/55, 2500 T-62, 2000 T-64, 7000 T-72, 3000 T-80 y 200 T-90). Sumando los 3330 tanques activos y 17,500 en almacenamiento, Moscovia contaba con un potencial de 20,000 tanques para el 23 de febrero.
Sin embargo, esta cantidad es más una especulación que una realidad. El problema es que Military Balance basa su análisis en datos de la época de la Unión Soviética. No considera factores como las exportaciones a África y Medio Oriente, la “canibalización” para exportación o uso interno desde 1991, y la calidad de conservación.
Análisis de OSINT (Open Source Intelligence) más actualizados, que se basan en imágenes satelitales de las bases, proporcionan una perspectiva más precisa, ya que los tanques más recuperables fueron los primeros en ser retirados durante los dos años de guerra activa. Hoy se retiran tanques almacenados al aire libre, lo que indica que el inventario de Moscovia en almacenes es más fácil de evaluar.
¿Existe un problema de disponibilidad de tanques para el enemigo?
Según el Estado Mayor de Ucrania, las pérdidas de tanques enemigos son de 5093 en 21 meses, con un promedio de 242 tanques por mes. Oryx, que confirma visualmente las pérdidas, registra 2419 tanques en 21 meses, o aproximadamente 115 por mes. Esto significa que, por cada dos tanques reportados por Ucrania, hay una confirmación visual de Oryx.
Incluso si promediamos los datos de ambas fuentes, el enemigo estaría perdiendo aproximadamente 179 tanques al mes en un periodo de 21 meses. Oryx confirma que, de las pérdidas, solo 137 fueron “dañados” y 152 “abandonados”; el resto se considera destruido o capturado por las Fuerzas Armadas de Ucrania (550 unidades). Esto sugiere que Moscovia solo podría haber recuperado hasta un 12% de sus pérdidas totales para reparaciones.
La producción de tanques nuevos de Moscovia es difícil de determinar, pero se estima que no supera las 100 unidades al año. El resto de las “nuevas” unidades provienen de tanques soviéticos despreservados y reacondicionados.
Inventario actual de tanques del enemigo
La cantidad activa de tanques a febrero de 2022 era de 3330 (con 3000 en buen estado). Moscovia ha incrementado las filas con voluntarios y movilizaciones parciales para compensar pérdidas y formar nuevas unidades. Sin embargo, la cantidad actual de tanques parece ser menor a la de antes de la invasión a gran escala en Ucrania. Según datos de OSINT, la cantidad de tanques en Ucrania es de aproximadamente 2200-2347, con cerca de 150 en reserva cerca de la frontera.
Hipótesis de capacidad de reposición
A pesar de las nuevas unidades y cuerpos de ejército, Moscovia no ha podido cubrir sus necesidades actuales. Las pérdidas superan la capacidad del complejo militar-industrial de Moscovia para reponer, considerando que la mayoría de los “tanques nuevos” provienen de unidades almacenadas, no de fabricación reciente. Esto implica que el enemigo no puede sostener su inventario de tanques a largo plazo si continúa la actual tasa de desgaste.
En cuanto a la cantidad de tanques en reserva aptos para su uso, el analista Covert Cabal, a inicios de 2022, estimó en base a imágenes satelitales que había 4,696 tanques en buen estado, listos para su reactivación. Para marzo de 2023, esta cifra disminuyó a 3,911, es decir, 785 menos en poco más de un año. En las bases de almacenamiento, según cálculos, se encontraban los siguientes números de tanques: 270 T-54/55, 560 T-62, 248 T-64, 1,841 T-72, 942 T-80 y 50 T-90. Estos datos coinciden, con una variación menor al 10%, con otros analistas y estimaciones en comunidades cerradas. Por ejemplo, el grupo de análisis militar ucraniano ¨Військовий віщун¨ (¨Militar Vidente¨) estima que hay entre 500 y 600 T-62 y 220 T-54/55 aún aptos para su reactivación.
Estos investigadores basan sus datos en análisis visuales y otras fuentes abiertas, además del análisis documental como el de Military Balance.
Así, Rusia tenía alrededor de 2,500 tanques operativos en otoño de 2023 y, potencialmente, podría reactivar otros 3,900 tanques en diversos estados de calidad. Sin embargo, cada tanque que se restaure será de menor calidad que el anterior, reduciendo la velocidad y calidad de reactivación, y aumentando el coste de restauración.
El enfoque actual está en la reactivación de T-80, mientras que los T-90A se modernizan al nivel T-90M. La capacidad total de tanques rusos está en torno a los 6,400, con una tasa de destrucción mensual de 179 tanques, según promedios del Estado Mayor ucraniano y Oryx. Bajo esta tasa, a Rusia le tomaría casi tres años agotar su reserva de tanques.
No obstante, varios factores pueden influir:
Las cifras de Oryx no capturan todas las pérdidas rusas, ya que algunos tanques destruidos no se identifican en la red.
Los tanques reactivados serán progresivamente de peor estado técnico, por lo que la tasa de destrucción podría aumentar.
Las operaciones exitosas de Ucrania y las tácticas suicidas rusas en Vuhledar y Avdiivka también podrían acelerar las pérdidas rusas.
La eliminación del parque de tanques ruso podría dividirse en tres fases:
Primera fase (realizada): Destrucción de las unidades más operativas que Rusia tenía al 24 de febrero, unos 3,300 tanques de mejor calidad, alcanzada en aproximadamente un año y medio.
Segunda fase (en curso): Los restos del parque de tanques inicial se compensan con nueva producción y reactivación rápida (principalmente T-80, T-62 y T-90). Aunque Moscovia no logra alcanzar las 4,000-4,500 unidades necesarias, mantiene 2,000-2,500 tanques en reserva. En esta fase, Ucrania debe destruir aproximadamente 4,000 tanques más de las series T-80 y T-72, tomando unos 10-14 meses adicionales.
Tercera fase (esperada): Cuando Rusia dependa de su producción nacional, limitada a 100-150 tanques al año, y de los modelos antiguos T-54/55, T-62 y T-64. Esto resultará en una agrupación de aproximadamente 1,500 tanques de baja calidad, y marcará el inicio de una crisis de tanques rusa. Ucrania necesitará alrededor de un año para agotar estas reservas, proyectando el final de las operaciones ofensivas rusas con tanques hacia mediados de 2026.
El problema se agudizará debido a que la industria militar rusa no podrá compensar las pérdidas al ritmo necesario, con un déficit estimado de 2,400 tanques respecto al nivel requerido de 4,000-4,500 unidades. Para finales de 2024, Rusia tendrá de 1,800 a 2,500 tanques relativamente modernos (T-80, T-72 y T-90). Sin embargo, para 2025-2026, el ejército ruso comenzará a sentir una crisis en la reposición de tanques, con unidades más antiguas y de peor calidad, y una reducción a 1,200-1,500 tanques.
Es decir, el agotamiento de los tanques rusos está proyectado para finales de 2025 o principios de 2026. Sin embargo, la "crisis" en la capacidad de tanques se hará sentir gradualmente y mucho antes de este punto de “agotamiento crítico”. Se espera que 2024 sea el "año de culminación" en cuanto al problema de los tanques, 2025 será un año de inercia (con el uso de las reservas operativas y los últimos tanques reactivados de las bases de almacenamiento), y en 2026 Rusia enfrentará la pérdida de una capacidad de tanques suficiente para operaciones ofensivas, marcando una "crisis de tanques".
Las afirmaciones de algunos medios y periodistas sobre la capacidad de producción de 1,000 tanques anuales son exageradas. Este número incluye hasta 100 unidades fabricadas desde cero, más los tanques reactivados de las bases de almacenamiento, que tienen un potencial de agotamiento, especialmente en términos de calidad. Para finales de 2025, se pronostica que Rusia experimentará una aguda escasez de tanques, ya que su complejo militar-industrial no podrá compensar las pérdidas debido al agotamiento de los tanques aptos para reactivación en las bases de almacenamiento.